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Densificación del hormigón

Ashford Formula, en el mercado desde 1949, es un producto líder en la densificación del hormigón. Se trata de un reactivo que penetra en los materiales de base cementosa protegiéndolos, conservándolos y reforzándolos permanentemente.aAshford Formula, en el mercado desde 1949, es un producto líder en la densificación del hormigón. Se trata de un reactivo que penetra en los materiales de base cementosa protegiéndolos, conservándolos y reforzándolos permanentemente. 

Densificación del hormigón

Ashford Formula, en el mercado desde 1949, es un producto líder en la densificación del hormigón. Se trata de un reactivo que penetra en los materiales de base cementosa protegiéndolos, conservándolos y reforzándolos permanentemente.aAshford Formula, en el mercado desde 1949, es un producto líder en la densificación del hormigón. Se trata de un reactivo que penetra en los materiales de base cementosa protegiéndolos, conservándolos y reforzándolos permanentemente. 

Servicios

ENDURECIMIENTO

Cuando se aplica a un hormigón que es estructuralmente sólido y ha sido de reciente y adecuado acabado, Ashford Formula consigue endurecerlo uniformemente mediante una reacción química de retención de humedad la cual es vital para el completo proceso de hidratación.

SELLADO

IBIS Formula penetra de manera profunda en el hormigón bloqueando los poros desde dentro. Es así como se consigue un sellado profundo y permanente en todo tipo de superficies de hormigón.

SOLIDIFICACIÓN

Ashford Formula rellena los capilares del hormigón aumentando la densidad, resistencia, dureza y, sobretodo, aumentando sustancialmente la resistencia a la abrasión y la durabilidad de la superficie de hormigón. El hormigón tratado con Ashford Formula incrementa la resistencia a la compresión en un 38% después de 30 días.

ANTI-POLVO

Ashford Formula bloquea químicamente el hidróxido de calcio, responsable de la acumulación de polvo en los suelos de hormigón.

ADHERENCIA

Ashford Formula prepara el área tratada para pinturas, compuestos de calafateado y recubrimientos del suelo eliminando de la superficie las sales de hormigón que son perjudiciales para una fijación adecuada. Con una única aplicación, el hormigón es endurecido y sellado de forma permanente para todo su tiempo de vida y es resistente a aceites, grasas y otros contaminantes.